Leo y releo a los líderes que nos sacarán del abismo ideológico y no hay manera, por más que lo intento no encuentro nada. NADA.
Apenas una trajecito lleno de lentejuelas irisadas, de teorías del buen hacer, de activismo, de ese que traerá el cambio…sin organización. Así es el líder verde de hoy, con él es suficiente. Con él basta. Eso sí es alternativa. Moderna. O más bien postmoderna.
Nos cuenta: El problema son unos presupuestos con falta de perspectiva ambiental, el problema es la falta de recursos económicos para paliar el cambio climático, el problema es la fusión del ministerio de medio ambiente con el de agricultura, el problema es la ministra…
¡¡No señor!! El problema es el capitalismo.
Sí, sí como lo oye CA-PI-TA-LIS-MO. Y despierte ya, Zapatero no es nuestro amigo y tampoco es de izquierdas.
Por eso si en España se margina al medio ambiente es porque a este señor le importa un comino todo lo que no sea velar por los intereses de la banca. Le importa un comino el drama del paro, las pensiones, la feminización de la pobreza y por supuesto el medio ambiente. Aunque a lo mejor no hablamos de lo mismo.
Yo desde luego no me conformo, claro que quiero que se pongan más placas solares, pero quiero que los y las trabajadores que las pongan participen del control de la empresa y trabajen con dignidad. Y también quiero una planificación democrática de la energía, que se produzca en función de las necesidades de la sociedad y no del mercado, que en su lógica acumulativa siempre pedirá más y más hasta el punto de apagar el sol. Y que haya un cambio en el modelo productivo, que redistribuya, con control público y sobre una base sustentable.
Desde luego el ecologismo del que hablo en lugar de tener en cuenta las inquietudes cosméticas que parecen atormentar a algunos partidos verdes, tan responsables y con tanto diseño, tiene en cuenta la contradicción capital naturaleza. Porque me imagino que los iluminados del nuevo advenimiento verde sabrán que de nada sirve plantear en un sistema cuya lógica es la acumulación sin límites nada que sea mínimamente sostenible. Es una incompatibilidad estructural. No hay espacio para la ecología en el capitalismo. Salvo que nos conformemos con que en los presupuestos generales del estado, la partida para cambio climático sea mayor. O que las subvenciones a las energías alternativas crezcan, o que se hagan decretos que no penalicen las instalaciones de paneles solares. Eso como mucho es ecologismo liberal, ese que tiñe de verde el nuevo nicho de mercado.
Frente a tanta mediocridad ideológica hay que volver a Sacristán.

Y este fin de semana al encuentro de ecología.

9 comentarios:

  1. ceronegativo dijo...

    me encanta cuando se dice el pecado y no el pecadorrrrrrrrrrr  

  2. alex dijo...

    ahi la has dado
    esa es la enorme diferencia entre ellos y nosotros: su posicion absolutamente entregada al sistema y con reformitas cosmetikas
    a eso añadamos su incapacidad para ver la globalidad de los problemas y aportar soluciones integrales
    y por supuesto su capacidad de conmoverse que diria gramsci se agotan en el osito polar de turno, la gaviota petroleada y el floripondio amenazado

    0 por el explotado, el marginado, el humillado, el chantajeado...
    esos forman parte indeseable del paisaje urbano...  

  3. Don Ricardo dijo...

    Sira, es que creo que tienes un problema digestivo o algo. Contra esas nauseas que te impiden votar junto a tus compañeros de grupo en defensa de la libertad, la democracia y los derechos de las personas, y te provocan incontenibles vomitonas, y contra esas otras que te impiden escribir la palabra "ecologismo", pues lo mejor es que tomes un medicamento que hay -que ahora mismo no recuerdo cómo se llama-, y te quedas como nueva.  

  4. Anónimo dijo...

    Hay otros que se tomaron el medicamento ese y lo que les pasó fue que dejaron de hacer autocrítica o simplemente se callaron ante las aberraciones que veían a su alrededor.

    Que se olvidaron que en 2007 la ONU borró a Cuba de los países que no cumplían integramente los DDHH. Que es uno de los países de américa con más IDH (índice de desarrollo humano)

    También olvidaron que en el Congreso de 2009 de DDHH de Naciones Unidas se reconoció el gran papel en este tema del gobierno cubano (mejor dicho del sistema cubano).

    Hay otros, que por ser ecologistas no les importa ir de la mano de quién no lo es. El ecologismo de la Coordinadora de Los Verdes nos hace reir a más de una/o. El ecologismo de quién apoya guerras imperialistas o centrales nucleares nos da par reír un poco más. Pero el ecologismo de quién un día fue comunista y luego socialdemócrata, o el ecologismo de quien un día fue liberal y luego demócrata, nos hace reir mucho más.  

  5. Anónimo dijo...

    jó qué tensión.

    esto de refundarse es durísimo, como un parto (en el más amplio sentido del término).

    mitxel  

  6. Anónimo dijo...

    Qué cosa más simple...que sí, que Uralde es un ecopijo y tú una revolucionaria ejemplar, claro que sí, como Reneses, Goyo...felicidades y viva la refundación  

  7. Grândola dijo...

    Genial el post, compañera.  

  8. Anónimo dijo...

    jajajajajajajaja
    nos creemos que la CHA es ecologista? nos creemos que Isaura es ecologista?? o Saura??? jajajajajaja

    y pudiendo llegar a la conclusión de que son ecologistas, ¿es el ecologismo que defendemos?

    el ecologismo apolítico de greenpeace es el nuestro??? o es la ecología social, la ecología que lucha contra el capitalismo por la que apostamos???

    para unos la refundación es sumara ICV y grupos nacionalistas por lograr un puñado de votos más.

    Para otros la refundación consiste en converger con bases sociales para construir una alternativa al capitalismo.

    Por eso es tan dificil llegar a un acuerdo sobre la refundación.  

  9. Don Ricardo dijo...

    Ya me acuerdo:

    ¡¡PRIMPERAM!!