No se os ocurra atravesar la línea roja. Que una cosa es tener posiciones críticas con nuestro modelo de Estado y nuestra economía del ladrillo y otra muy distinta es luchar de forma activa utilizando todos los recursos del propio Estado para combatirlas.
Lo primero es la nota de color, casi exótica que nos saca de vez en cuando del letargo y aburrimiento al que nos tienen sometidas y sometidos los grupos políticos mayoritarios y que sin duda agradecen profundamente a IU.
Lo segundo pone en un brete todo un sistema de valores que beneficia claramente a un grupo se sujetos que tienen todo un aparato trabajando para la consecución de sus objetivos.
Y claro dentro de ese denso equipo de trabajo siempre hay gente de orden a la que no le tiembla el pulso a la hora de imponer sanciones ejemplarizantes. No vaya a ser que se convierta en costumbre eso de ir denunciando a mangantes y tengamos que revisar las bases de nuestra amada patria.

Desde aquí mi más profunda solidaridad y apoyo a Manuel Fuentes. Y marchemos, marchemos, marchemos contra la corrupción.