Inconmensurable Chavez. Entrevista sin desperdicio aquí.
A lo mejor escuchándolo encontramos pistas para resolver nuestro problema de comunicación.

Querido Hugo, aquí te dejo las líneas de una carta que Marx escribió a su amigo Arnold Ruge en 1843. Dan cuenta de lo poco que han cambiado las cosas (¡una pena!) y por lo tanto de cuál debería seguir siendo nuestro enfoque.

…no nos enfrentamos al mundo en actitud doctrinaria, con un nuevo principio: ¡Esta es la verdad, arrodíllense ante ella! Desarrollamos nuevos principios para el mundo a base de los propios principios del mundo. No le decimos al mundo: termina con tus luchas, pues son estúpidas; te daremos la verdadera consigna de lucha. Nos limitamos a mostrarle al mundo por qué está luchando en verdad, y la conciencia es algo que tendrá que asimilar, aunque no quiera.
La reforma de la conciencia consiste solamente en hacer que el mundo sea consciente de su propia consciencia, en despertarlo de la ensoñación que tiene de sí mismo, de explicarle el significado de sus propias acciones. Nuestro objetivo general no puede ser otra cosa que –como también lo es para la crítica de la religión de Feuerbach- darle a los problemas religiosos y filosóficos la forma que le corresponde al hombre, que se ha vuelto consciente de sí mismo.
Entonces, nuestro lema deberá ser: la reforma de la conciencia, no por medio de dogmas, sino a través el análisis de la conciencia mística, ininteligible a sí misma, ya sea que se manifieste en su forma religiosa o política. Luego será evidente que el mundo ha estado soñando por mucho tiempo con la posesión de una cosa de la cual, para poseerla realmente, debe tener consciencia. Será evidente que no se trata de trazar una línea mental entre el pasado y el presente, sino de materializar los pensamientos del pasado. Finalmente, será evidente que la humanidad no está comenzando una nueva tarea, sino que está llevando a cabo de manera consciente su vieja tarea.
En resumen, podemos formular la tendencia de la revista: la autoconsciencia (filosofía crítica) por parte del presente de sus luchas y deseos. Ésta es una tarea para el mundo y para nosotros. Sólo puede ser la tarea de fuerzas unidas. Requiere de una confesión y nada más. Para asegurar el perdón de sus pecados, la humanidad sólo debe declararlos tal y como son.

Es curioso el lugar desde el que percibimos las cosas. Acabo de quedarme estupefacta, pero de emoción, al ver a Hugo Chávez desfilar sobre la alfombra roja del festival de Venecia. Su presencia, debida a la presentación del documental rodado por Oliver Stone acerca de su figura, se ganó una gran ovación del público presente el la sala. Supongo que ellos y ellas sintieron lo mismo que yo, esa mezcla de descaro e impostura de un hombre que no se arruga frente a apolilladas costumbres burguesas y que es inevitable que te genere una especie de alegría, de tarea concluida, de restitución.
El medio de comunicación en cuestión, el informativo de Telecinco, absolutamente sobreactuado y con cierto síndrome de rabieta adolescente, acusando a Stone de izquierdista, a su documental de edulcorado y a Chávez de dictador.
Lástima que a los adalides de la libertad, la falta de tiempo, no les de para contar cómo hasta sesenta cargos públicos colombianos afines a Uribe están imputados, procesados o encarcelados por delitos relacionados con narcotráfico, pertenecía a grupos paramilitares, etc. O para informarnos con un poquito de rigor sobre la importancia de las bases militares estadounidenses en territorio colombiano.
Y menos mal que todavía hay gente que tiene sentido de la justicia y denuncia bien alto. Así lo hizo Fran Pérez, Secretario Federal de Cooperación y Derechos Humanos de IU el pasado viernes en un acto celebrado en el CAUM, compartiendo estas y otras lindezas acerca de la política colombiana y su inquebrantable colaboración con EEUU.
El mundo al revés.

Y digo yo ¿no sería más importante fijarse en lo trascendente? Porque ZP agita el plumero del populismo y todos miramos. Mientras tanto se pone de acuerdo con la patronal en lo realmente importante: la moderación y ajuste salarial.
La política fiscal de PSOE ha consistido en bajar el impuesto de sociedades del 25 al 20%, suprimir el impuesto de patrimonio, bajarle el tramo a las grandes rentas salariales del 50 al 46%, mientras que las del trabajo se vieron reducidas de 7 a 5 tramos con un máximo del 46% y todo ello sin tocar las rentas del capital que sólo tributan el 18%. Política de izquierdas, vamos.

Ahora este icono del izquierdismo nos trae su propuesta de aumento de impuestos. Y no me entendáis mal, estoy completamente de acuerdo, pero desde luego yo me quedo con la síntesis superadora de que pague más el que más gana.
Claro que el gobierno está ante una encrucijada, ahora que la deuda pública empieza a ser temible y que el PP aprieta por un lado recortando intención de voto y la necesidad de aprobar los presupuestos con la izquierda aprietan por otro, es cuando los amigos del PSOE nos ofrecen un poquito de cosmético izquierdista con subida de impuestos, mientras da millones de euros a la banca y mantiene el status quo del capitalismo español basado históricamente, entre otros elementos, en una moderación salarial estructural. Redistribución en estado puro. Más política de izquierdas.

Así que nosotras a lo nuestro, a seguir defendiendo lo público, la fiscalidad progresiva, un cambio en el modelo salarial y productivo que permitan restituir la precariedad de la clase trabajadora… y desde luego que no compren votos parlamentarios con maquillaje falso. Ese se va por el sumidero a partir de la media noche.

Que nos engañen, lobos con piel de cordero


*Todos estos datos, además de otras reflexiones, me las ha proporcionado una fuente que por pudor y timidez permanece en el anonimato y al que hoy dedico mi entrada.